sábado, 24 de noviembre de 2018

MESHES OF THE AFTERNOON, UNA PELÍCULA EXPERIMENTAL

En esta nueva entrada hablaremos de ''Mashes of the afternoon''  o ''Redes en el atardecer'' la película más representativa de Maya Deren, la madre de cine underground, surrealista y de vanguardia en Estados Unidos.


Su debut nos transporta a un mundo en el que la realidad y los sueños se confunden, y la muerte parece esconderse dentro de nosotros mismos.
'Meshes of the Afternoon' es una de las películas experimentales más importantes e influyentes del siglo XX. Este cortometraje de carácter feminista, dirigido por Maya Deren, explora las imágenes del interior de una mujer, en cuyos sueños tiene un terror hacia los objetos de su vida cotidiana. La llave por ejemplo, representa el matrimonio y la vida cotidiana. La visión alternativa de esta producción tuvo un gran valor artístico en su época, y es una de las más fuertes influencias en cineastas de renombre, como Jean Cocteau, Luís Buñuel o David Lynch.


En esta película, se cuestionan todas las convenciones del cine americano: la cronología linear, el montaje invisible y continuo y la temática puramente romántica.





“Meshes of the afternoon” es claramente surrealista, como si la protagonista estuviera inmersa en la espiral de una pesadilla en la que unos mismos hechos van repitiéndose una y otra vez, y en cada una de esas veces aparecen elementos nuevos, además de diferentes personajes que podríamos considerar doppelgangers, dobles de sí misma, como si pudiéramos ver a la vez diferentes versiones de ella según el espacio, el tiempo, su actitud, las acciones que lleva a cabo.





Esta film tiene una clara finalidad artística y simbólica:

  • Tanto la primera escena como la última presentan hechos puramente simbólicos y desconcertantes ya que difuminan la frontera entre realidad y sueño. En la primera escena aparece una mano de maniquí de una mujer y una flor de papel. La mano representa a la mujer como un objeto inerte en la sociedad, siendo solo un objeto de placer, reproducción y necesidad para la figura masculina. La flor representa la delicadeza y la feminidad. Debemos señalar también en esta escena la edición mediante la cual se hacen desaparecer o desplazar objetos, en este caso el brazo, para distorsionar la realidad, algo que estará presente durante todo la película.



  • Con respecto a la segunda escena, esta representa una silueta negra con un espejo roto y llevando una flor. La mujer persigue esta silueta, sin embargo nunca la llega a alcanzar. Esto representa la relación entre muerte y mujer, y se traduce en la búsqueda de liberación que la mujer persigue. La mujer nunca se llega a ver reflejada en el espejo, por lo que la carencia de reflejo en el espejo determina la inexistencia de identidad de la mujer que siempre se encuentra sumisa por la del hombre.

  • La dirección hacia la habitación se visualiza con muchas escaleras , representándolo como la apropiación por parte del hombre, y el sometimiento que la mujer sufre en él.  La mujer sube las escaleras, se sienta con la flor sobre su regazo, toca su cuerpo sensualmente y aquí, la cámara nos ofrece un primer plano de su ojo que nos recuerda a la fotografía de Man Ray o a la sangrienta escena de Un Chien Andalou. El ojo es la ventana o entrada al mundo interior de la protagonista, como vemos en la transición realidad-sueño cuando la cámara se desplaza hacia atrás dentro de un túnel, formando un “ojo” en la pantalla. Cuando el ojo de la mujer se cierra, pasamos al sueño.



  • La llave que sale de la boca de la mujer es un momento liberador, ya que deshace la institución del matrimonio.

  • En la tercera escena, se muestra la cama, y en ella la flor y el cuchillo, esto representa cuando la feminidad y masculinidad se encuentran y al mismo tiempo la mujer es dominada por el hombre.
  • En el momento en el que la mujer mira el cuchillo, hace referencia a la imposición de la masculinidad.



Parte del logro de esta película consiste en la manera en que las técnicas cinematográficas son empleadas para dar una malévola vitalidad a los objetos inanimados. Otro de los aciertos de Meshes es, sin duda, la sensación de porosidad que se produce entre la realidad y el sueño. Lo real acaba penetrando en el sueño de la misma forma que el sueño penetra en la realidad, produciendo una confusión entre ambos que acaba por hacer imposible desentrañar lo uno de lo otro.


Para finalizar, añadiremos un pequeño análisis de la película y un vídeo para que se conozca mejor a la autora de esta:













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