En esta nueva entrada hablaremos de la película ''Solo los amantes sobreviven'', un film dirigida por Jim Jarmusch.
Esta película retrata la historia de dos vampiros amantes, artistas, sofisticados y de siglos de antigüedad, que ponderan su mejor lugar en la sociedad moderna. Nos encontramos ante una historia fuera de lo común entre Adán , pálido y delgado, músico underground y amante de las guitarras, con una personalidad con tendencia al enfado, prácticamente autista y superdotado, y Eva, vitalista, poderosa, muy talentosa y elegante. Son dos enamorados totalmente contrapuestos, que viven en ciudades antagónicas, y cuya historia de amor ha prevalecido varios siglos. Los dos tienen un aspecto excéntrico y deambulan por la vida con una actitud opuesta pero con la firme convicción de que se aman por encima de todo.
La figura del vampiro ha ido sufriendo a lo largo del tiempo diferentes adaptaciones. El vampiro ha sido protagonista en los últimos años de grandes películas en toda clase de ambientes. En esta película, su director le ha dado un gran carácter personal a la figura de estos, eliminando el carácter clásico del vampiro. Estos vampiros son de diseño, caracterizados por la estética moderna y de colores puros con gran contraste, es decir, el va de negro, ella de blanco. Es de gran importancia la elegancia en el vestuario.
Lo que Jarmusch quiere es, por un lado, mostrar esos personajes de diseño, circunstancialmente vampiros. Y por otro lado, mostrar un mundo más que contar una historia, y hacerlo con un ritmo lento, pausado, en ocasiones incluso lindante con el aburrimiento Es el artificio, la forma en la que Jarmusch quiere mostrar su habitual elegancia visual.
Como lo que perdura del retrato de Jarmusch es lo visual, el centro de atención de la película, y lo más logrado, está en su reparto. Tom Hiddleston y Tilda Swinton, los protagonistas, son dos actores que se encuentran lejos de los cánones de belleza actuales.
Caben destacar diferentes aspectos de la película:
Adán usa como alias «Doctor Caligari», personaje de la película ‘El gabinete del doctor Caligari’ del director Robert Wiene.
Los vampiros de esta película no beben sangre de manera tradicional: lo hacen en copas y con enormes precauciones, debido a lo que llaman la «contaminación», una alegoría a lo que se supone como enfermedades y también «la imperfección» de la sangre humana. En busca de sangre fresca que beber, Adán usa los servicios de un doctor anónimo, a quien se presenta como el doctor Caligari, como alusión a la película de Robert Wiene y que se considera la primera obra del expresionismo alemán. La referencia tiene doble lectura: en el film de 1920, el doctor Caligari es un médico que usa a un «sonámbulo» para asesinar personas y lo hace en medio de una complejísima trama donde la locura y la doble comprensión de la realidad se mezclan para crear una historia compleja. De la misma manera que Adán y Eva, Caligari considera a los hombres «sonámbulos» (zombies para los vampiros de Jarmusch) y también asesina haciéndose pasar por un doctor.
Estos vampiros no están obsesionados con la sangre, sino con la belleza.
Para los vampiros, la sangre no es tan importante como el arte y todas sus manifestaciones. De hecho, el director insistió en crear personajes que parecen alimentarse de lo estético y lo visualmente estimulante con tanto entusiasmo como otros vampiros bebiendo sangre.
Detroit como una ciudad vampira.
La ciudad de Detroit es una ciudad fantasma con los peores índices en materia de desocupación, pobreza, criminalidad y analfabetismo en norteamérica. Esta ciudad se ha declarado en quiebra después de ser por décadas un símbolo de la prosperidad americana. Con sus calles vacías, casas abandonadas y fábricas convertidas en escombros, se le llama «la ciudad vampira», por lo que es esta ciudad la que Jarmusch escogió para que su vampiro meditara sobre la tragedia de la atemporalidad. Se trata de una ironía doble: Adán se queja de la «incapacidad del hombre para entender la belleza del mundo» mientras medra en teatros vacíos, edificios destruidos y locales abiertos a medianoche. Toda una metáfora sobre la pérdida de la humanidad, el tiempo que transcurre y destruye y la caída de la inocencia.
Los vampiros de Jarmusch usan guantes de cuero como una vuelta de tuerca a la usual iconografía vampírica
Adam y Eve se cubren sus manos con guantes de cuero blanco. Esta referencia parece remontarse a la época de la caza mayor inglesa en la India: Los viejos cazadores solían llevar guantes blancos para demostrar que a pesar de su instinto y necesidad de matar a la presa, continuaban siendo dignos hijos del Imperio británico, que a su vez, se declaraba epítome de la intelectualidad. Con un golpe de efecto Jarmusch une ambos conceptos en una iconografía nueva que transforma a sus vampiros en algo más depredadores nocturnos.
Para Jarmusch el cabello de los vampiros refleja su naturaleza,en lugar de la piel.
El director insistió que tanto Adán como Eva, tuvieran un raro cabello de aspecto pajizo, abundante y despeinado. Para el director fue la manera de demostrar la naturaleza salvaje de sus criaturas. Se confeccionaron más de doce pelucas para diferentes momentos del film y cada una de ellas, tiene una textura y grosor distinto. El director insistió en más de una vez que prefirió que fuera una melena salvaje y casi animal lo que definiera a sus criaturas, en lugar de la tonalidad de su piel, como es tradicional.
Para finalizar, añadiremos algunos vídeos interesantes sobre la película.
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